NOSOTRAS, el poder que nos habita
Creadoras por naturaleza, generadoras de soluciones, pacificadoras y maestras en el arte de emprender cualquier misión que se presente en el camino; NOSOTRAS, las mujeres, fluimos en la inigualable, poderosa y maravillosa armonía de la vida.
Sabedoras de que la fuerza de la unidad hace que surjan asombrosas maneras para gestionar nuestro paso; históricamente, al unirnos hacemos posible lo inimaginable. Por mencionar sólo un ejemplo entre miles de millones que desconocemos: el movimiento Women's Social and Political Union resultó en una poderosa defensa del derecho al voto para las mujeres, poco antes de 1918. ¡Gracias por esto, mujeres!
En alguna escena del tiempo nos hicieron creer sigilosamente, que estar unidas es peligroso. Desconozco cuándo y cómo se generó esa mentira que ha ido en aumento dañino cual bola de nieve que rueda por una colina cubierta de más nieve. Reconozco al mismo tiempo, que ha sido una mentira tan intensa y prolongada, que sin más, la hemos creído todas hasta darle cabida en nuestro ADN.
¡Por fortuna!, bajo la invisibilidad, algunas sabias mujeres continuaron REuniéndose frecuentemente para fluir, construir, cocrear y convertir toda su energía en una imparable resonancia que se esparce en el espacio hasta dar con más mujeres poseedoras de la energía correcta. Esas mujeres conversaban, estructuraban y planeaban desde espacios aceptados llamados familia; otras lo hacían en áreas más místicas y prohibidas, como círculos de mujeres, y también en otros lugares más públicos y aceptables (aunque cuestionables) como: reuniones con amistades, asociaciones y organizaciones y otros.
Deseosas sin pausa
El deseo de seguir construyendo y cultivando juntas ha permanecido en nosotras y actualmente se ha vuelto una contundente declaración de amor y también de guerra, bien lo ha dicho Shakira
“Hay un lugar reservado en el infierno, para aquellas mujeres que no apoyan a otras”
Naturalmente, aún vivimos sometidas en el efecto dañino que por siglos ha silenciado la fuerza y tenacidad de las mujeres. Algunas se sucumben de manera consciente y otras de forma inconsciente. Debido a esto, un sentimiento de división caló y se acomodó entre NOSOTRAS.
Nosotras somos las hijas de miles de millones de historias de terror, de miedo y crueldad, pero también de magia, entereza, fuerza, esperanza, poder y amor.
Nunca estuvimos, ni hemos habitado esta tierra solas, ni aisladas; sólo hemos estado dispersas, distraídas y ocupadas o preocupadas. ¿Te resuena esto? Afirmo que no hemos estado solas, porque cosas maravillosas también han sucedido. Citaré algunos ejemplos, y seguramente vendrán más a tu mente (y estaré dichosa de que los compartas con todas). Mira, algunas mujeres que demostraron el poder de la unidad:
Las Solfatara de Pompeya: fue un grupo de mujeres que en el siglo XVIII se reunía en las ruinas de Pompeya, para estudiar las ruinas y descubrir la historia antigua de la ciudad. A pesar de estar prohibido, estas mujeres se arriesgaban a entrar en las excavaciones para estudiar las antigüedades. Querían conocer la historia, pero especialmente: rescatar sus orígenes, enseñanzas y toda la sabiduría volcada en cenizas.
Las Night Witches: un grupo de mujeres piloto soviéticas, que volaron misiones de combate nocturnas durante la Segunda Guerra Mundial. Muy a pesar de los peligros e infinitas dificultades, estas mujeres lograron realizar misiones exitosas y tuvieron un gran impacto en la lucha contra los nazis, increíble verdad.
Las Madres de Plaza de Mayo: Quién acaso no ha escuchado de ellas, durante una de las más cruentas dictaduras de América Latina, estas mujeres se unieron para luchar por sus hijos e hijas desaparecidos a manos del régimen. Se reunieron todos los jueves en la Plaza de Mayo, en Buenos Aires. Exigían información sobre sus hijos, y en protesta pacifica, sostenida por el poderoso amor maternal, se convirtieron en un símbolo de la resistencia contra la dictadura logrando mantener la atención mundial en los crímenes y la violencia del gobierno; contribuyendo así a la caída del régimen. Un ejemplo de resistencia y lucha por los derechos humanos en todo el mundo.
¿Y hoy, qué sigue?
Durante largas noches, por mucho tiempo, me he preguntado qué fuerza hizo a estas mujeres tan especiales ¿Acaso el dolor, la época o la terquedad? ¿Por qué y cómo ellas siguieron unidas?
¿No vivían con miedo, no las habían tachado de histéricas y peligrosas?
¿Qué tenían?
¿Qué las hizo tan especiales y diferentes?
¿Será que la maldición de esa creencia de competir o “combatir" entre ellas nunca las alcanzó?
Pronto te contaré lo que he “descubierto” pero por ahora no esperes mas ÚNETE a NOSOTRAS, el círculo de sabiduría femenina en Amsterdam para mujeres que buscan conectar con su sabiduría y poder interior, con otras mujeres y con el mundo de posibilidades que le brinda la migración; en un ambiente seguro, de apoyo, aprendizaje y sanación.
